domingo, 14 de diciembre de 2008

Una estrella fugaz, una noche de diciembre, y la lluvia

   Se fue el último recital de la gira La Marca de Caín, tras una serie de presentaciones que lo llevó a bordo de "ese tren sin freno" a recorrer el país, el cual ya lo había depositado en Rosario en dos oportunidades en el mes de marzo.
   El traslado de la fecha (se pasó del 6 al 13 de diciembre), su proximidad con los recitales del Indio Solari (el sábado 20 y domingo 21 en La Plata), y las fiestas navideñas me hicieron pensar que no habría tanto público, pero inversamente desde temprano en la noche, con la lluvia de portal los seguidores de Skay y la diosa Kali poblaban la planta baja y el primer piso de Willie Dixon al son de los cánticos habituales y el insistente "sólo te pido que se vuelvan a juntar".
   El lugar, ideal, se podía circular con tranqulidad en búsqueda de lo que se prestaba para la noche húmeda, una cerveza bien fría y unos cuantos rocanroles, lazo de dos generaciones.
   Cerca de las doce de la noche, aparecieron los copilotos para dar paso luego al excelso guitarrista con reminisencias a aquella época en la cual el hippismo empezaba a florecer, y hace eco de ello, portando la clásica vincha, lentes y a través de sus movimientos.
   La atmósfera muy íntima permitía apreciar que las caricias a su bella y esbelta doncella colorada no descollan sino por el placer que surge innato de su espíritu, de donde se escapan los rastros de su voz, porque es un músico que innova, y muestra de ello son las reversiones de sus propios temas.
   Si bien incumplió la promesa de adelantar alguna de las canciones que formarán parte de su disco, a la luz a mediados del año venidero según sus propias palabras, debo decir que quedé muy satisfecha al escuchar El síndrome del trapecista, que me lo debía de la vez pasada, unas aceleradas Bye bye -cuyo riff inicial me llevó a una anticipación equivocada creyendo que el tema que comenzaba era Estás frito Angelito- y Astrolabio, las cuales sorprendieron a más de uno, y unas reinventadas melodías provenientes de otra galaxia, como las que se oyeron en el clásico redondo Nueva Roma o Gengis Khan. Sí, el Flaco será un hippie de nacimiento, pero no le esquiva a la tecnología si es para aportarle más brillo a sus creaciones.
   También le doy gracias infinitamente a Skay por no caer en la predictibilidad del Indio, y haber dejado entonces a Ji ji ji no para el final, sino intercalado entre otros temas durante el transcurso del recital.
   Seguimos girando... sin lugar para los débiles, los siguientes días serán recordados como el interín hasta el show del Pelado. A preparar los bolsos porque las aguas ya no están serenas y Porco Rex nos espera en su última parada en La Plata.

domingo, 7 de diciembre de 2008

Sucia y desprolija

  La peatonal Córdoba -recientemente reparada por vez no-me-acuerdo-ya-perdí-la-cuenta-, bajando por el Monumento a la Bandera, y siguiendo la avenida Belgrano hasta completar el paseo de la Costa para terminar el paseo encandilándose en los shoppings, son la fachada en la que traslucen su entusiasmo turistas y visitantes que llegan a la ciudad.
"Otra vez, esa sandía, echándole la culpa al empedrado..." Sin embargo, existe una parte de Rosario que muchos no incluyen en su intinerario, y no me refiero sólo a los foráneos: los barrios alejados del centro, cuyas debilidades quedaron desbordadas semanas atrás cuando la implacable tormenta dejó sin electricidad a una gran cantidad de familias por más de un día y con todo lo que eso implica en estos días de incipientes altas temperaturas, son los principales protagonistas, y a la vez los excluidos en esta coyuntura.
   Veredas rotas adornadas con basura por doquier, calles que se inundan ante el menor chaparrón, servicios interrumpidos, incluso cuando están siendo abonados, falta de infraestructura escencial y van... Por eso, políticos dignos de representar la elección que los ha llevado a las Cámaras, a la hora de armar el presupuesto es importante discernir cuáles son las prioridades de aquello que puede esperar, y en lugar de pasarse el problema cual si fuera una pelota, marquen, defiendan y ataquen en equipo para llegar a la solución adecuadamente.
   No obstante, hay una parte de la responsabilidad que nos cabe a nosotros, los habitantes y ciudadanos, estos hábitos son válidos para todas los lugares del país... y más allá...
  • Si tiene un papel, envoltorio, lata y/o elemento extraño a la vereda, y se siente tentado de arrojarlo, manténgalo en sus manos unos instantes hasta que divise el cesto de basura más próximo, aunque esto pueda llevarle bastante tiempo y es probable que llegue a su destino antes de encontrarlo.
  • Dado que la EPE, Aguas, y los servicios básicos están gobernados por una secta de burócratas ineptos que no realizan las inversiones pertinentes, busquemos algunos consejos para ahorrar energía o agua y evitar sobrecargas o cortes, como apagar las luces, televisor... ¡¡¡fundamentalistas del aire acondicionado a 15ºC!!! Asimismo hay que recordar cerrar las canillas cuando no se precisen, ya que imagínese si todos recibiéramos baños de inmersión durante una hora 2 veces por día. 
  • Saque la basura antes del horario que pasan los recolectores, y por favor, recuerde que los contenedores para la construcción no son depósitos de muebles, ni los containers (ahora que todos dominamos el spanglish mejor que nuestro idioma, no quiero quedar al margen, ¿vio?) tachos de basura. También recuerde que ud. sigue siendo responsable del perrito que gentilmente habita en su casa hasta cuando hace las necesidades y descargas fuera.
   Es un trabajo duro, pero alguien tiene que hacerlo... y no me escriban que esto jamás lo han leído.

"Son muchos pensamientos para una sola cosa, estoy algo cansado de vivir en realidad;
no cambia nada estar un poco sucio.
Si mi cabeza es eficaz".
Sucio y desprolijo, Pappo.

Canción incluida en el segundo párrafo: Tsunami, Indio Solari. 

lunes, 24 de noviembre de 2008

El Lobo Estepario

   Hay bastantes personas de índole parecida a como era Harry; muchos artistas principalmente pertenecen a esta especie. Estos hombres tienen todos dentro de sí dos almas, dos naturalezas; en ellos existe lo divino y lo demoníaco, la sangre materna y la paterna, la capacidad de ventura y la capacidad de sufrimiento, tan hostiles y confusos lo uno junto y dentro de lo otro, como estaban en Harry el lobo y el hombre. Y estas personas, cuya existencia es muy agitada, viven a veces en sus raros momentos de felicidad algo tan fuerte y tan indeciblemente hermoso, la espuma de la dicha momentánea salta con frecuencia tan alta y deslumbrante por encima del mar del sufrimiento, que este breve relámpago de ventura alcanza y encanta radiante a otras personas. Así se producen, como preciosa y fugitiva espuma de felicidad sobre el mar de sufrimiento, todas aquellas obras de arte, en las cuales un solo hombre atormentado se eleva por un momento tan alto sobre su propio destino, que su dicha luce como una estrella, y a todos aquellos que la ven, les parece algo eterno y como su propio sueño de felicidad.

    El hombre no posee muy desarrollada la capacidad de pensar, y hasta el más espiritual y cultivado mira al mundo y a sí propio siempre a través del lente de fórmulas muy ingenuas, simplificadoras y engañosas - ¡especialmente a sí propio!-. Pues, a lo que parece, es una necesidad innata fatal en todos los hombres representarse cada uno su yo como una unidad. Y aunque esta quimera sufra con frecuencia algún grave contratiempo y alguna sacudida, vuelve siempre a curar y surgir lozana. El juez, sentado frente al asesino y mirándolo a los ojos, que oye hablar todo un rato al criminal con su propia voz (la del juez) y encuentra además en su propio interior todos los matices y capacidades y posibilidades del otro, vuelve ya al momento siguiente a su propia identidad, a ser juez, se cobija de nuevo rápidamente en la funda de su yo imaginario, cumple con su deber y condena a muerte al asesino. Y si alguna vez en las almas humanas organizadas delicadamente y de especiales condiciones de talento surge el presentimiento de su diversidad, si ellas, como todos los genios, rompen el mito de la unidad de la persona y se consideran como polipartitas, como un haz de muchos yos, entonces, con sólo que lleguen a expresar esto, las encierra inmediatamente la mayoría, llama en auxilio a la ciencia, comprueba esquizofrenia y protege al mundo de que de la boca de estos desgraciados tenga que oír un eco de la verdad. Pero ¿a qué perder aquí palabras, a qué expresar cosas cuyo conocimiento se sobreentiende para todo el que piense, pero que no es costumbre expresarlas? Cuando, por consiguiente, un hombre se adelanta a extender a una duplicidad la unidad imaginada del yo, resulta ya casi un genio, al menos en todo caso una excepción rara e interesante. Pero en realidad ningún yo, ni siquiera el más ingenuo, es una unidad, sino un mundo altamente multiforme, un pequeño cielo de estrellas, un caos de formas, de gradaciones y de estados, de herencias y de posibilidades. Que cada uno individualmente se afane por tomar a este caos por una unidad y hable de su yo como si fuera un fenómeno simple, sólidamente conformado y delimitado claramente: esta ilusión natural a todo hombre (aun al más elevado) parece ser una necesidad, una exigencia de la vida, lo mismo que el respirar y el comer. La ilusión descansa en una sencilla traslación. Como cuerpo, cada hombre es uno; como alma, jamás. También en poesía, hasta en la más refinada, se viene operando siempre desde tiempo inmemorial con personajes aparentemente completos, aparentemente de unidad. En la poesía que hasta ahora se conoce, los especialistas, los competentes, prefieren el drama, y con razón, pues ofrece (u ofrecería) la posibilidad máxima de representar al yo como una multiplicidad -si a esto no lo contradijera la grosera apariencia de que cada personaje aislado del drama ha de antojársenos una unidad, ya que está metido dentro de un cuerpo solo, unitario y cerrado.

    En lugar de estrechar tu mundo, de simplificar tu alma, tendrás que acoger cada vez más mundo, tendrás que acoger a la postre al mundo entero en tu alma dolorosamente ensanchada, para llegar acaso algún día al fin, al descanso. Por este camino marcharon Buda y todos los grandes hombres, unos a sabiendas, otros inconscientemente, mientras la aventura les salía bien. Nacimiento significa desunión del todo, significa limitación, penosa reencarnación. Vuelta al todo, anulación de la dolorosa individualidad quiere decir: haber ensanchado tanto el alma que pueda volver a comprender nuevamente al todo.

Herman Hesse

lunes, 17 de noviembre de 2008

"Pensar que si él no puede dormir, ¿cómo volverá a soñar de nuevo?"

   Por favor, sepamos bien de lo que estamos hablando. Hay una brecha de 5 millones de personas que son escondidas, así como se oculta la basura debajo de la alfombra, la inflación que determina el INDEC (Instituto Nacional de Estadísticas y Censos) pasa por alto que el 32% y hasta el 36% de la población -según economistas independientes- vive bajo la línea de pobreza.
   Esto quiere decir que estamos ante una situación semejante, con otros nombres al frente del poder y otras dimensiones demográficas, claro, a la del 2001.
   Los especialistas coinciden en que la causa que exacerbó las pésimas condiciones de vida es la inflación, acentuada a partir de mediados de 2006. Además de eso, una caída del ingreso mínimo, que continúa descendiendo.
   Cuando a muchos no les queda otra alternativa que la de concurrir a los comedores comunitarios en busca de una ayuda para lograr completar o cubrir parcialmente sus necesidades básicas insatisfechas o las de sus hijos, todavía resulta indignante creer que con $150 por mes puede alimentarse una persona. Los planes sociales o esa ínfima asistencia que se les brinda no allanan las respuestas a las familias argentinas en tiempos de crisis, en los que más débiles se encuentran, a la espera de respuestas que no llegan de parte de un gobierno que no capta el mensaje.
   ¿Cuál es entonces la peor ignorancia? ¿La de aquellos que mienten para su beneficio en nombre de quienes  ven cada vez más anegadas las vías hacia la educación, el conocimiento y la capacitación, o la de aquellos a quienes le censuran la posibilidad de superarse a sí mismos por sí mismos?

"Estoy muerto de miedo vivo.
Estoy aquí para morir.
Aquí para morir.
Asustado vivo.
Aquí para morir.
Muerto de miedo de la vida".
Unemployable (Desempleado), Pearl Jam.

sábado, 8 de noviembre de 2008

"Maldición, va a ser un día hermoso"

    Que antes hacía frío, que ahora hace calor...
    Es el tema predilecto y fácil de conversación con los vecinos, en cualquier vereda podemos comprobarlo. Y según mis últimos experimentos, no tiene un rango de edad específico. No, no, no las señalen a las nonas. Es que un sector de la población cada vez más amplio se apropia de esta costumbre, entendible, ya que después de la espectacular e inolvidable granizada del 16 de noviembre de 2006 en Rosario ya no somos los mismos. De este modo, el clima pasa a ser una especie de trampolín para iniciar una charla, y acabarla ahí, seguramente. En lugar del clásico: "Hola, buen día, ¿qué tal?" o "¿cómo está?", ya nos disparan la expresión "qué calor está haciendo", sonando hasta redundante, mientras se precipita la enorme gota de la frente.
    Y no me digan que de verdad hay una conciencia nacional sobre el calentamiento global cuando te tiran un par de lamparitas de bajo consumo por la cabeza... el mismo, lamentablemente, pasó a ser un tema de relleno desde hace tiempo, como los que tanto abundan en los medios de (in)comunicación. Ni qué hablar de los conductores del los noticieros que bromean con los Confesore's (los encargados de dar las noticias del tiempo que ni siquiera son meteorólogos, aunque ejercen de eso) y asiduamente practican también en el exceso de cuestiones personales que a ni mi, ni a ud. ni al mismísimo Jorgito Rial le interesan.
    Ahora bien, pasemos a ese numerito que causa tan polémico que causa tal revuelo cada vez que aparece en la pantalla de su televisor, generalmente al lado de la temperatura actual. Adivinó: la tan preciada sensación térmica. ¡Qué mareo! Suficiente tenemos con la temperatura que nos vienen a agregar la térmica... ¿A cuál le hacemos caso entonces?
    Por lo pronto, desde aquí los saludo, y me voy a ver cuántos héctor-pascuales de presión hay.

"Maldición va a ser un día como los demáaas",
Maldición, va a ser un día hermoso, Patricio Rey y sus Redonditos de Ricota.