"Cada uno de ustedes, interesado en la creatividad,
quiere entrar en contacto con aquello de sí mismo que es auténticamente propio".
La navegación por la red es una tentación para dedos curiosos, por la potencia que tienen de encontrar un campo de búsquedas que matemáticamente hablando, tienden al infinito. Así, dadas ciertas páginas abiertas en el navegador, aunque uno se embista la cabeza contra la pared, cual judío contra el Muro de los Lamentos, le costará recordar cómo fue que llegó hasta allí.
Pues bien, hace unos meses, di con el llamativo Zen en el arte de escribir, texto que consignaba su autoría a Ray Bradbury. Inconcebible para mí fue pasar por alto una sociedad Bradbury+Zen, pero como una anda como con pata de palo arrastrando tantas lecturas pendientes, lo guardé entre los pdf's y lo postergué hasta esta tarde... no pude cuando menos emitir un ¡¡¡FAAA!!! así de fastuoso porque resultó que ¡el mismo tenía apenas 7 páginas!
En el momento en que escribo, descubro que en realidad se trata de un libro entero, el cual, por supuesto descargué enseguida, para leerlo... espero que pronto... Guau... otra vez no quería explayarme tan en detalle sino sólo compartir algunas sensaciones que me provocó la versión abreviada de este texto y haber terminado la reseña de Nacidos para correr pero se ve que estos dedos se traen otros objetivos entre manos. Al fin y al cabo, la escritura es lo único que siempre quise hacer, desde que en las clases de Literatura nos encomendaban escribir ensayos sobre las obras leídas. Siempre quise volver, gracias por recordármelo, Ray y Don Julio.
[...] "no deberíamos desdeñar el trabajo ni desdeñar los cuarenta y cinco o cincuenta y dos cuentos escritos en nuestro primer año de fracasos. Fracasar es rendirse. Pero uno está en medio de un proceso móvil. Entonces no hay nada que fracase. Todo continúa. Se ha hecho el trabajo. Si está bien, uno aprende. Si está mal, aprende todavía más. El único fracaso es detenerse. No trabajar es apagarse, endurecerse, ponerse nervioso; no trabajar daña al proceso creativo".
Zen en el arte de escribir, Ray Bradbury.
Esta publicación es muy oportuna para dejarte cierto comentario: me acabo de enterar que ayer 13 de junio fue el día del escritor.... Y por supuesto que también de la escritora, así que ¡Felíz Día!
ResponderEliminarTus textos son muy emotivos y reflexivos, y eso les da un valor extraordinario. Me alegra que regreses a la escritura.
¡Muchas Gracias! Me alegra encontrarte en la blogosfera también :)
ResponderEliminarSomos multidimensionales jaja.
Un texto de Ray que despierta y recuerda el proceso creativo, en hora buena!!La magia y la creación en las manos y en la mente, no se puede despreciar o abandonar en el tiempo...
ResponderEliminarSiga as; despabilando las letras!
Abrazo!
¡Loba! Me llevo tus buenas ondas para despabilar esas letras nomás ;)
ResponderEliminarUn abrazo.