lunes, 19 de abril de 2010

Y un día... Matisyahu volvió a Rosario

    -Ahh, mirá que curioso... ese es el judío que toca reggae - dije al observar algunos afiches que empapelaban -en forma ilegal, por cierto- una obra en construcción.
    -Uh, yo lo escuchaba en la época que iba a la escuela! - espetó Emanuel, mi compañero.
    Se trataba de Matisyahu, cuya música me presentó apenas regresamos a mi casa, y luego de varias horas de escucha supe que me encantaba la canción Youth y que iría a comprar las entradas para verlo el sábado siguiente, cuando llegase a la ciudad.
    Luego de un sinuoso paseo por el barrio de Arroyito hasta localizar el shopping Alto Rosario con la ayuda afable de varios peatones y la desorientación de una muchacha que atendía una heladería, agudizábamos la mirada para encontrar ahora un lugar dentro del Salón Metropolitano, lugar de la cita.
    "All my life I've been waiting for..." Está bien, está bien... no esperamos tanto tiempo, pero sí nos dio motivo para conjeturar si Matisyahu se habria quedado sacándose fotos en el Monumento, o si habría seguido los consejos de la presidenta, proveyéndose en el supermercados de algunos cortes del afrodisíaco cerdo argentino.

   Y repentinamente, mientras esperaba un vaso de cerveza que había ido a buscar Emanuel, apareció una banda compuesta por batería, guitarra y bajo, tocando un dub bastante alegre, el cual comenzaba a animar la noche.
    Llegó la cerveza... ¡y Matisyahu! Un sorbo que se tradujo al paladar como exquisito, y a las pulsaciones, a su vez como un momento singular para disfrutarlo, asintiendo nuestras cabezas.

    Pasadas alrededor de unas tres canciones, el vocalista se dirigió al público, y en particular a los espectadores sentados en varias hileras, dentro de un "corral" alambrado que circundaba casi todo el escenario. "Do you think it's alright?" ("¿Ustedes piensan que  eso está bien"?), les preguntó refiriéndose al lugar privilegiado que ocupaban quienes habían abonado una entrada mayor precio, mientras nosotros mirábamos detrás de las vallas colocadas como separadores, instantes después divertidos al observar a la mayoría de los concurrentes levantando sus manos como muestra de aprobación. De este modo, el efusivo Matisyahu  pidió a los asistentes (léase patovicas) quitar las obstrucciones, y al fin pudimos acercarnos todos al escenario.
    Más allá de algunos inconvenientes con respecto al sonido, los ritmos le ajustaron la tonalidad a la noche, oscilando entre el constante reggae y el hip-hop, al tiempo que la gran cantidad de gente no dejaba de corear los solos de guitarra. Pese a su carácter sosegado, pudimos verlo vehemente, desplazándose dando saltos a lo largo del escenario, conservando intacta su voz, y muy distendido, sobre todo cuando interpretó la base rítmica que nos contuvimos por aplaudir hasta que terminó.



    Secundado por afónicos espectadores, celulares y cámaras captaban su imagen, desplegó su sensibilidad creativa en cada una de sus canciones, y también cuando se arrojó sobre los concurrentes, emulando el smosh clásico de los recitales rockeros. Ya la segunda ocasión se lanzó en un zambullido de tal vibra que cuando intentó volver junto a los músicos, algunos seguidores quedaron amarrados a sus piernas.
   Sin dudas, las canciones más ovacionadas fueron la potente Youth, durante la cual incluso se formó un pogo, King without a crown, cuando se añadió un saltarín 'guapo del 900', la legendaria Exaltation, y por supuesto, su último éxito One day, en esta oportunidad sin la presencia de Fidel Nadal. Aunque tampoco hubo Pettinato, como en el Gran Rex de Buenos Aires, ni banda soporte, hacia la madrugada del domingo, Matis y su grupo nos habían diseminado plenamente su energía, así como los deseos de saber cuándo volverá tras la conclusión de su gira en el país.


    Un día, Matisyahu volvió a Rosario, yo ya lo conocía a Emanuel y compartimos el primer recital, del cual no sólo conservamos las entradas, sino además una nueva y agradable melodía en tono de reggae que acompasa cada acorde de la vida.

lunes, 22 de febrero de 2010

Las manos sueltas

   Quiero ver tus manos sueltas, tu mente aprehensiva es capaz de hasta lo intangible. Y si llevás una carga, que sean los libros, los tantos latentes por leer. Que nos desvele sólo el trazado de nuestros sueños, resaltado con la avidez de nuestras miradas, testigos del crecimiento. Quiero ver tus manos sueltas, recibirme... recibirnos, caminando y luego vueltos a sentarnos, porque sobre las tierras pedregosas el paso se hace firme y certero entre tus dedos.

   A mi compañero de estudio, mi mitad y mi entero.

domingo, 3 de enero de 2010

La Caravana de los Deseos, parte I

Fuegos artificiales con el sello MR (Municipalidad de Rosario) sobre el Paraná anoche, bajo este slogan, barquitos vienen y van... y que baile quien pueda, mientras la emergencia no lo ahogue.
¿Calentamiento global, lluvias en desmesura? Las inundaciones constituyen el efecto de una política negligente encabezada, en el caso santafesino, por la mente ingeniosamente lucrativa del senador y "presidenciable".
   Mediante un ejercicio retrospectivo, viajaremos (la embarcación corre por su cuenta) a los años '90, cuando la ley de 1991 creó el Consejo Regional de Obras de Saneamiento de los Bajos Meridionales, área que abarca parte del norte de la provincia de Santa Fe y el sur de la de Chaco, cuyo objetivo era canalizar los excedentes de la región acentuados por tratarse de un terreno de suave pendiente, el agua circula lentamente, proceso dificultado por la escasa permeabilidad del suelo. Pero se trasladó hacia el oeste, es decir que siendo este humedal un factor de influencia importante en la dinámica del río Salado, la cantidad de agua se volcó hacia esta zona, careciendo de los estudios y consenso social adecuados, visto el carácter público del conflicto ocasionado a causa de la reconstrucción de un terraplén interprovincial en 1998 (gobernación de Obeid = mismo partido y no agrego más), cuando productores chaqueños lo destruyeron con el fin de restablecer la circulación de agua. Todo ello inserto en el auge del polo agroexportador del gran Rosario, sobre el eje de la concentración de las tierras y la producción de soja.
   En resumen, la canalización -ilegal o no- mientras drenó por un lado, inundó otro sector. Contradiciendo el principio de toda obra, que debe empezar de un nivel inferior hacia uno superior, provocaron estragos en ambos casos, tanto la alteración de la diversidad del ecosistema de esteros y forraje debido a la desertificación traducida en las consecuentes pérdida de la vegetación e imposibilidad de alimentar al ganado, así como lo evidenciado por las drásticas inundaciones producidas en el 2003, de las que Reutemann, en sus tiempos de gobernador, dio cuenta casi como sin haberlo querido.
  
   La Dirección Hidráulica provincial, a cargo del Consejo Regional antes mencionado se caracterizó por imponer su corte burocrático (clásico rasgo de la administración 'Lole') e impedir la participación amplia ante la amenaza de arriesgar el poder.
   Actualmente, podemos apreciar que pese a muertes, heridos y copiosa cantidad de bienes materiales que se ha llevado la corriente, la situación no se ha modificado. En la llamada Línea Paraná, dirigentes rurales del Consejo Regional Económico del Norte Santafesino (Co.Re.No.Sa) aseveraron, según el portal Periodismo Plural de Santa Fe en mayo del año pasado, cuando la sequía azotaba a parte importante del país, que el gobierno no ha invertido en las correspondientes compuertas, con las cuales debían complementarse los canales para equilibrarlos durante los períodos de escasez, si bien se ha focalizado en el consumo humano a partir de la distribución de agua, es una realidad innegable que las actividades económicas obtenidas de la producción fijan los asentamientos de la población.
   He tratado de ser lo más sucinta y clara posible desde los datos que pude obtener de Internet. La clave estriba en la sustentabilidad de la población, sólo así podrán ponderarse las necesidades de los habitantes de innumerables regiones en riesgo de ser arrasadas. Una vez más, la responsabilidad es de todos, bajo ningún signo partidista.

Fuentes y mayor información:



sábado, 26 de diciembre de 2009

Para no cumplir más

Ayer o durante el transcurso de cualquiera de los 364 días contados a partir de ahora,
una vela más o menos apagada de quienes aun se dan el gusto de completarlas,
empezar a indagar sobre cuánto falta, cuánto queda, sin ahondar en los retratos que descolgué por última vez.
Ensimismarme aunque sea lo que duren sus tonos ambivalentes, de vez en cuando suplicantes, presumidos sus trajes avasallantes... esas miradas corrosivas, que no duelan más.
No tocarlos, los años cumplidos se encargarán de ellos.

martes, 15 de diciembre de 2009

Untitled

    Quien pudo (y puede) ver más allá, permite ya a su cabeza girar un poco hacia acá (sin replegarse tanto).
    Quien se encuentra lo suficientemente despierto para dejarse llevar y que el viento no lo quiebre en algún cataclismo del impredecible devenir social.
    Reacio a volverse endeble, será quien apure ahora a las circunstancias.
    Seré yo, serás vos, serán aquellos... nuestros rulos erizados que se peinan al hablar.
    El timón de la paciencia, la resistencia a la añoranza.